La parte distal de la aorta ascendente recibe una fuerte propulsión de sangre cuando el ventrículo izquierdo se contrae. Debido a que su pared no está reforzada por el pericardio fibroso (el pericardio fibroso se fusiona con la adventicia de la aorta al principio del arco), puede desarrollarse un aneurisma (dilatación localizada).
El aneurisma puede ser evidente en una radigrafía de tórax, como un agrandamiento de la silueta de la aorta ascendente. Los individuos con aneurisma suelen quejarse de dolor torácico que irradia a la espalda
martes, 16 de junio de 2009
Suscribirse a:
Entradas (Atom)